Te toca, es tu turno, pásamela…el concepto es el mismo: jugar en equipo y respetar los turnos. Y si a esto le añadimos sonidos, vivos colores y una textura agradable al tacto, entonces comprendemos por qué la Pelota bota bota de Fisher-Price es uno de los 10 juguetes más queridos por los niños.
La pelota o balón es probablemente el juguete más universal. Con versiones para todas las edades y presente en la mayoría de culturas, las posibilidades de juego que ofrece son enormes. Lanzar, botar, chutar, encestar…supone el elemento central de muchos deportes y juegos, pero lo más destacable es que permite interactuar con otras personas y en edades más tempranas, un recurso muy útil para aprender en compañía.
Las ventajas del juego con otras personas son incuestionables. Para nuestros bebés, el hecho de compartir sus juegos les permite un aprendizaje más rico gracias a la observación e imitación de las técnicas ajenas, pero además le resulta más divertido. Les enseña también a respetar turnos, a compartir los triunfos y a encajar mejor las "derrotas".
En forma a todos los niveles
A nivel físico, la pelota contribuye a mejorar la motricidad gruesa, ya que anima al niño a desplazarse tras ella, a abrazarla, arrojarla, atraparla…mejora sus reflejos y le ayuda a entender la relación causa-efecto y a conseguir pequeños logros, gracias a la repetición de los mismos movimientos.
A nivel emocional, está demostrado que los juegos que requieren cierta actividad física contribuyen a mejorar la autoestima y la confianza del bebé, al enseñarle a controlar su cuerpo y mejorar sus habilidades motrices. Y si estos juegos son en equipo desarrollan también sus habilidades sociales.
Cuando hablamos de una pelota ideal para bebés a partir de 6 meses, la Pelota bota a bota es una buena opción por varios motivos. Su composición con materiales blanditos protege al niño de golpes indeseados. Dispone de diferentes opciones para actividades en las que el bebé podrá descubrir los colores, los números, aprender a contar o disfrutar de bonitas melodías.
Un juguete completo con el que el niño se puede iniciar en actividades de carácter deportivo, pero adaptado a su edad y sobre todo con el que puede aprender divirtiéndose hasta en los momentos de descanso de su particular “liga”.
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